El doble voto simultáneo, conocido usualmente como ley de lemas, es un sistema electoral usado en Honduras y, parcialmente, en Argentina y en Uruguay. Sus características son las siguientes:
- Cada partido político o coalición de partidos es un LEMA.
- Cada lema puede tener varios sublemas (listas de candidaturas de candidatos agrupados en torno al lema, pero con énfasis políticos diferentes del partido/lema o con una organización propia dentro del mismo; situación típica del sistema político del Uruguay).
- En las elecciones funciona de la siguiente forma:
- Se presentan candidaturas de los sublemas agrupados en torno a un lema.
- Los electores escogen la lista de candidatos (sublema) de su preferencia.
- En el conteo de votos se suman todas las preferencias de los sublemas al lema en torno al cual están agrupados.
- Dependiendo del número de cargos a llenar:
- Plurinominal (por ejemplo, la elección de legisladores en distritos con dos o más escaños por llenar): se usa un sistema proporcional. Se asignan los cargos según la cantidad de votos de los lemas, y posteriormente dentro de cada lema se asigna a cada sublema los correspondientes cupos según su representatividad;
- Uninominal (elección de una sola autoridad o cargo, por ejemplo Presidente o Gobernador): se declara ganador, por mayoría simple, el lema más votado. Del interior del lema ganador es electo el sublema más votado.
Sistema de doble voto simultáneo y acumulativo
Un LEMA es un PARTIDO, FRENTE o ALIANZA que puede estar integrado por muchos sublemas, que son distintas listas dentro del LEMA. Resulta electo el LEMA que mayor votos obtiene, sumando TODOS los votos de TODOS los sublemas que lo integran. Al interior del LEMA, gana el sublema que mayor cantidad de votos consiguió.
Cuando se sancione la Ley, estará vigente para cargos provinciales: Gobernador y Vice, Diputados Provinciales, Senadores Provinciales e Intendentes de localidades sin concejos deliberantes. Están definitivamente excluidos la elección para presidente y vicepresidente; tampoco será utilizada para elección de diputados y senadores nacionales.
Las ciudades de la Provincia que tienen concejos deliberantes podrían aplicar si adhieren sus HCD por ordenanza. Y en ese caso se aplicarà para intendente y vice, concejales e integrantes del Tribunal de Contralor en el caso de Villa Mercedes.
Vamos a ejemplificar una elecciòn a cargo ejecutivo.
Supongamos que se presentan TRES lemas: VERDE, AZUL y ROJO. Con los SUBLEMAS y los candidatos imaginarios que se observan en la siguiente imagen.
Y que luego del acto electoral, los resultados se dan de la manera que se indica en cada caso.
El LEMA VERDE obtuvo 16 votos; el AZUL consiguiò 33 votos y el ROJO 35 votos. El LEMA ganador es el Lema Rojo (recordar que cada LEMA es un partido polìtico, alianza o frente electoral).
Gana entonces el LEMA ROJO, y la Gobernadora serìa la del SUBLEMA ROSA, ya que es el SUBLEMA màs votado.
En este caso que analizamos, el SUBLEMA ROSA es el màs votado al inerior del LEMA y a la vez es el SUBLEMA màs votado considerando TODOS LOS LEMAS. O sea que el gobernador (para el ejemplo, gobernadora) electa es quien obtuvo efectivamente màs votos. 24 votos en nuestro ejemplo.
En la siguiente imagen se expone otra situaciòn en la que puede presentarse el caso en que un LEMA tenga la mayorìa de los sufragios en la suma, y en consecuencia sea el LEMA ganador; pero un SUBLEMA de otro LEMA tenga más votos que los SUBLEMAS del LEMA ganador. En ese caso podría acceder a gobernar un candidato que numéricamente no haya sido el más votado. Este es el aspecto que más cuestionamientos ha recibido; el caso hiper referenciado es el de la provincia de Santa Cruz en 2015. Alicia Kirchner obtuvo 56.969 votos. Dentro del mismo lema Daniel Peralta, 27.464. En total obtuvieron 84.433 sufragios. Eduardo Costa, de Cambiemos, consiguió 67.174 votos. Fue el candidato más votado. Osvaldo Pérez obtuvo 7816 votos dentro del mismo lema y de esta forma sumaron 74.990. Kirchner fue gobernadora con el 34,8% de los votos totales contra el 41% de Costa.
Aparecen tres aspectos o componentes de anállisis para explicar esta resultante; considerando que siempre enfrentamos sistemas electorales -cualquiera sea- imperfectos. Con aspectos a favor y en contra pues en la sociedad habrá siempre diferentes opiniones y posicionamientos. Se trata de sintetizar el criterio mayoritario de la manera más fidedigna que sea posible.
El primer ejercicio que se puede intentar es el de especular con qué hubiera pasado si se aplicara el sistema aún vigente de PASO o PAS o de elecciones internas. Traslademos linealmente la elección imaginaria de nuestros colores a una elección interna. Con el mismo resultado nos encontraríamos en ujn segundo acto eleccionario -la "general", en la que competirían los respectivos ganadores de la interna: el Rojo (con la candidata Rosa de Lejos); el Azul representado por el candidato Azulejo Cuadro y los Verdes con María Verdina. ¿Y qué resultado sería el "esperable"? Pues que cada "perdedor" en la interna se encolumne detrás del respectivo ganador y le aporte los votos que consiguió en la primaria. Es legítimo pensar que cualquier otro resultado o transferencia de votos entre fuerzas de diferente color no debería generarse más allá de corrimientos escasos. Hay mayores puntos de contacto entre Rosa, Naranja, Rosín y Bordó que entre cualquiera de éstos y cualquiera de las líneas internas azuladas o verdosas. Otras relaciones y/o otros cruces pueden entrar en la categoría de contubernio y desnaturalizar la voluntad del votante.
Un segundo aspecto digno de ser señalado es el de lo colectivo por sobre lo individual. Esto está en la esencia de lo democrático, que deberían priorizar el conjunto. Los LEMAS, en esta línea de pensamiento, se construyen en torno a un conjunto de ideas en común que constituyen la doctrina o ideología partidaria; o un acuerdo programático constitutivo de frente o alianza. La reunión de sublemas constituyendo lemas, puede disminuir la incidencia de los personalismos a favor de lo grupal.
No es menor, finalmente y como el tercero de los aspectos adelantados sin pretenciones de totalidad, las apertura de posibilidades que un sistema de lemas abre para la participación electoral de grupos que -con otros sistemas- suelen verse menguadas o directamente desalentados o impedidos.
El Sistema D'hondt
En 1878 un belga llamado Victor D'Hondt desarrolló un método para asignar bancas o escaños en cuerpos colegiados de manera proporcional al número de votos recibidos por las fuerzas competidoras en la elección. Se trata de un método de "promedio mayor" (no es el único) que se caracterizan por dividir mediante sucesivos divisores los totales de los votos obtenidos por los distintos partidos, dando secuencias de cocientes decrecientes para cada partido y asignando los escaños a los promedios más altos. Los matemáticos coinciden en que -en general- no es posible alcanzar la proporcionalidad exacta, ya que no es posible asignar un número decimal de escaños (una banca es una banca; y no puede dividirse en media banca o en un tercio de banca...).
Es el método utilizado en la Argentina y en muchísimos otros países, no obstante de los métodos comúnmente utilizados para la conversión proporcional de votos en escaños, el método d’Hondt, siendo bastante proporcional, tiende a favorecer un poco más que otros a los grandes partidos.
Veamos un ejemplo, aplicado a la renovación de 4 bancas de diputados. Para nuestro caso vuelven a cometir las fuerzas Verde, Azul y Rojo. Los votos que obtiene cada uno se dividen por 1, por 2, por 3 y por 4.
Esta es la manera en que se asignarían bancas de diputados en una elección general, suponiendo que al interior de cada partido o fuerza política o alianza o frente ya se resolvió previamente (en eleciones internas o en mesa de consenso) cómo presentar una sola lista.
Ley de Lemas y Sistema D'hondt y paridad de género
Dijimos al inicio de este texto que la Ley de Lemas unifica en un solo acto electoral, la interna y la general. En San Luis, además, rige la ley de paridad de género que para 2023 obliga a que encabecen muejeres cada lista. Y que luego se alterne hasta completar el número de lugares en disputa. Entonces combinemos ambas instancias y -mediante un ejemplo, otra vez- observemos como se aplicaría de manera concreta (siempre que, recordemos, el proyecto de Ley de lemas que ya tiene media sanción se apruebe en Senadores y no sufra modificaciones).
En este punto habrá que considerar el Artículo 11 de la Ley, siempre que se apruebe tal cual, reiteramos.
Puesto en acción, podría ser...
Algunas preguntas y respuestas
¿Este sistema es más “barato”?
Es muy difícil, además de indacuado, poner unpprecio al sistema de representación democrático. No obstante, en tiempos de crisis económicas siempre el aspecto presupuestario es uno que la sociedad considera y tiene en cuenta. Aunque desde nuestro punto de vista este debate está promocionado por los sectores del poder real que buscan desprestigiar a la política para "liberarse" de los controles sociales que les acotan el margen de maniobra discrecional con el que siempre intentan desenvolverse.
Con esa salvedad hecha, el sistema de lemas, en tanto es un solo acto eleccionario en lugar de dos, es más económico.
¿Este sistema es más “complejo” o “difícil de entender”?
El votante elije a la fuerza política de su interés o al candidato de su preferencia y lo vota. Cada elector debe complrender, en este y en todos los sistemas, que una elección no es un acto individual y que su voluntad se conjuga con las voluntades de conciudadanos, comprovincianos y compatriotas para alcanzar una síntesis representativa proporcionalmente. Todos los métodos tienen aspectos destacados y otras dimensiones menos virtuosas: no existe el método perfecto e infalible.
¿Es una “trampa” o esconde algún engaño?
La ley -proyecto por ahora- no tiene cláusulas ocultas ni términos ambiguos. Esto significa que lo bueno y lo malo, lo positivo y lo negativo aplica para todas las fuerzas. Oficialismos y opoitores. Si es trampa es trampa para todos y los aspectos positivos / beneficiosos lo son para todos los actores políticos también.
¿Puede resultar electo un candidato diferente al que obtuvo más votos?
Sí. Puede darse este caso, como comprobamos en los ejemplos que expusimos en la explicación de más arriba. Es posible, aunque no es probable.
Otros sistemas electorales también tienen riesgo de distorsiones. Por ejemplo, el sistema de Colegio Electoral que estuvo vigente en Argentina hasta 1994, año de la Reforma Constitucional, establecía la elección de presidente mediante este procedimiento indirecto: los electores elegíamos integrantes al colegio electoral (con cierta proporcionalidad en relación con la cantidad de habitantes por región) que luego se reunían para designar al presidente. Este sistema sigue vigente en la nación que se autoproclama la cuna y el modelo de democracia: EEUU y tiene mucash más probabilidades de que se proclame quien no obtuvo la mayoría de sufragios que el sistema de lemas.
¿Este sistema permite más participación?
Sin dudas. Y más participación significa más democracia.