El funcionario afirmó que durante los cuatro años del gobierno de Macri, la deuda de YPF aumentó en US$ 2.000 millones, mientras que la producción de petróleo cayó entre un 11% y un 15%.
En contraste, González aseguró que bajo su gestión, la empresa ha logrado un crecimiento en sus números, reduciendo la deuda y aumentando la producción. Señaló que en el campo Vaca Muerta, el costo de desarrollo por barril ha disminuido significativamente, y que la compañía ha experimentado un crecimiento interanual del 30% en el sector no convencional.
El presidente de YPF también criticó la falta de inversiones extranjeras en Vaca Muerta durante el gobierno de Macri, alegando que las grandes compañías del mundo llegaron a la zona antes de ese período, pero entre 2015 y 2019, ninguna empresa invirtió en la región.
González enfatizó que el petróleo y el gas son considerados "un recurso estratégico nacional" desde su visión, mientras que acusó a la administración anterior de considerarlos simplemente como "un mero commodity".
Además, destacó los desarrollos en el área de litio y energías renovables, resaltando la producción de celdas para baterías de litio que comenzará en septiembre a través de la división Y-TEC. Aspira a que YPF se convierta en la "primera productora de energía renovable" del país a través de su subsidiaria YPF Luz.
También mencionó el proyecto de Palermo Aike en Santa Cruz, considerado como la "segunda Vaca Muerta", cuya perforación comenzará en agosto.
Por último, el presidente de YPF elogió la relación de "confianza" con el actual ministro de Economía, Sergio Massa, en contraposición al extitular del Palacio de Hacienda, Martín Guzmán, a quien consideró difícil de trabajar.