Las políticas económicas del gobierno nacional están causando estragos en la economía argentina, generando una creciente desesperación entre la población que lucha por llegar a fin de mes. Todos están haciendo recortes en sus gastos para estirar sus ingresos lo más posible. Sin embargo, esta reducción del consumo también está afectando a diversos sectores del comercio y la industria. En la provincia, la demanda de combustibles ha caído drásticamente debido a los constantes aumentos de precios, llegando a igualar los niveles registrados durante la pandemia. Las ventas de nafta premium han descendido un 52 por ciento, según lo confirmado por la Cámara local.